• Chispazos

    ¿Por qué este desasosiego?

    Si no te abrasaste la lengua con la sopa, si los plátanos siguen amarillos en el frutero, si pillaste paraguas antes de salir de casa, si hiciste el disfraz para el cole o lo compraste ya en Amazon, si los niños están bien, tu marido…

  • Chispazos

    Frío

    Decir adiós da frío. Empaquetar tus cosas, también. Hacer scroll, sin rumbo, congela.Deslizar el dedo por la pantalla del móvil en lugar de por tu piel, me hiela. Encontrar en Wallapop nuestro cuadro del salón, ese con el marco color wengué, como querías, «a juego…

  • Chispazos

    Sobre las pérdidas invisibles

    Perder: Dejar de tener aquello que se poseía, sea por culpa o descuido del poseedor, sea por contingencia o desgracia. Cuando Candela comunicó a su pareja que había perdido al bebé que esperaban, que había desaparecido la posibilidad de un segundo hijo, la posibilidad de…

  • Chispazos

    El vestido azul

    El día que murió papá yo llevaba puesto un vestido azul espectacular. Perdón, rebobinemos. La tarde en la que me llamaron para decirme que papá había muerto, yo llevaba un vestido azul, tan bonito como una tarde de verano y tan inapropiado como la muerte.…

  • Chispazos

    Primeras veces

    El primer chico que pidió salir a Candela se llamaba Armillo. Ese era su apellido porque nadie le llamaba por su nombre. Nadie sabía su nombre. Se lo pidió un sábado, antes de Navidad, en el pub donde todo el instituto celebraba que habían terminado…

  • Chispazos

    Invencible

    Menos mal que de pequeña su madre le había enseñado a sonreír no sólo con la boca sino con los ojos. Y eso mismo es lo que había estado haciendo todo el día mientras pasaba los productos por el escáner de la caja. Tomates, garbanzos,…

  • Dos más dos
    Chispazos

    Dos más dos igual a tres

    Cuanto más se restregaba la palma de la mano aún enrojecida, más odio sentía hacia Don Eustaquio. Sin embargo, el reglazo, ese golpe seco, que el maestro le había propinado sin piedad delante de toda la clase, le dolía menos que la quemazón que sentía…